Comer es uno de los mayores placeres de la vida, sobre todo cuando se trata de productos de alta calidad. Existen infinidad de recetas que hacen uso de productos alimenticios que podríamos llamar “gourmet” , productos tan variados como, carnes, pescados, mariscos, setas, aceites, salsas etc. En nuestra geografía tenemos la suerte de contar con el cerdo ibérico, fuente de numerosos productos gourmet de la más alta calidad muy valorados en España. Es el caso del solomillo ibérico. Es una exquisitez preparado de cualquier forma. Es importante tener en cuenta que no es lo mismo un solomillo ibérico de bellota que el denominado de “cochino blanco”, el primero tiene mucha más calidad que el segundo.
En cuanto al solomillo, una de las recetas más sabrosas que he probado es la que os presento a continuación, el Solomillo con queso de cabra y cebolla caramelizada. La combinación de sabores agridulces y salados, con la textura del queso de cabra y la ternura del solomillo la hacen una receta difícil de igualar.
Si no os gusta demasiado el queso de cabra podéis cambiarlo por otro tipo de queso que también tenga un sabor fuerte que permita crear ese contraste. Si lo que no os gusta es el sabor fuerte, el queso brie ideal ya que tiene un sabor muy suave que casa perfectamente con el sabor agridulce de la cebolla caramelizada y el sabor y la textura del solomillo.
Este plato es muy fácil de preparar, necesitamos pocos ingredientes que podremos encontrar en tiendas como La Cabaña del Gourmet , y el proceso de elaboración esta al alcance de cualquier manazas. Además el tiempo de preparación es muy corto por lo que podéis prepararlo justo antes de sentarnos en la mesa y tenerlo ya preparado en la misma a la llegada de los comensales. Es una buena forma de vestir la mesa. La ventaja de este plato es que el solomillo se hace rápidamente y podéis dejar todos los ingredientes preparados para darle sólo un toque de calor y directo a la mesa. Como siempre, tenéis que tener cuidado con dejar el solomillo en su punto y no muy hecho para que la carne no se quede dura.
INGREDIENTES:
- 5 medallones de solomillo/persona
- 5 medallones de queso de cabra/persona
- Cebolla caramelizada
- Aceite de oliva
- Sal
PREPARACIÓN:
El primer paso es preparar la cebolla caramelizada. Es lo que más tiempo nos va a costar hacer, por lo que debemos dejarla preparada antes que el resto de ingredientes del plato.
La cebolla caramelizada se prepara de la siguiente manera Hay que poner la cebolla cortada muy fina en rodajas en una sartén con un poco de aceite de oliva. Cuando vemos que la consistencia de la cebolla empieza a volverse blanda y transparente le añadimos azúcar, una vez empiece a caramelizarse, añadiremos vinagre a la mezcla, y ponemos a fuego lento para que el vinagre vaya evaporándose. Una vez el vinagre se ha evaporado tendremos lista nuestra cebolla caramelizada.
Lo demás es rápido y sencillo, ponemos una sartén al fuego con un poquito de aceite de oliva y distribuimos los medallones de solomillo con sal. Tenlo al fuego hasta que el medallón quede dorado por ambas partes, si quieres puedes probar con un primer medallón para calcular el tiempo, puede ser buena idea.
Una vez dorados preparamos los solomillos en el plato, y ponemos durante unos pocos segundos las rodajas de queso de cabra en la sartén, vuelta y vuelta para darles un toque de color. Ponemos la rodaja de queso de cabra sobre el medallón y añadimos encima cebolla caramelizada al gusto.