Sumérgete en el encanto y la elegancia de un postre clásico con un giro sofisticado que promete deleitar tus sentidos. El Flan de Café Gourmet es una oda a los amantes del café y a los entusiastas del dulce, una fusión perfecta que convierte un simple flan en una experiencia culinaria inolvidable. Esta receta está diseñada para 5 personas, ideal para compartir en una cena especial o como el colofón de una comida familiar.
Cada bocado de este flan te llevará a través de una textura suave y sedosa, con el aroma intenso del café que se complementa maravillosamente con el dulzor caramelizado y el toque crujiente de nueces tostadas. La preparación es una ceremonia en sí misma, donde el caramelo dorado se une con la cremosidad del flan, creando una sinfonía de sabores que se equilibran a la perfección.
Prepárate para impresionar y deleitar a tus invitados con un postre que no solo es un festín para el paladar, sino también un espectáculo para la vista. Sigue esta receta detallada para crear un Flan de Café Gourmet que será recordado mucho después del último bocado.
Ingredientes para la receta de flan de café
- 625 ml de leche entera (para un sabor más rico)
- 5 huevos grandes, a temperatura ambiente
- 100 g de azúcar blanca, y un poco más para el caramelo
- 2 cucharadas colmadas de café soluble de buena calidad
- 1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional, para añadir profundidad al sabor)
- Una pizca de sal (para realzar los sabores)
- Caramelo:
- 100 g de azúcar
- 30 ml de agua
- Unas gotas de zumo de limón (para evitar la cristalización)
- Para servir:
- Nata montada (preferiblemente montada en casa con un poco de azúcar y vainilla)
- Nueces tostadas y picadas (para una textura crujiente y sabor tostado)
- Granos de café cubiertos de chocolate o cacao en polvo (opcional, para decorar)
Como preparar flan de café
- Preparar el caramelo:
- En una sartén a fuego medio, combina el azúcar, el agua y las gotas de zumo de limón. No remuevas, solo mueve la sartén suavemente para que el calor se distribuya uniformemente.
- Cocina hasta que el azúcar se disuelva y tome un color ámbar dorado. Vierte inmediatamente en el fondo de la flanera, inclinando para cubrir uniformemente. Deja enfriar.
- Infusionar la leche:
- Calienta la leche en una cacerola hasta que esté a punto de hervir. Apaga el fuego y añade el café soluble, la vainilla y la pizca de sal. Remueve hasta que esté completamente disuelto y deja reposar para que se infusione y temple.
- Preparar la mezcla de flan:
- En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté pálida y espumosa.
- Vierte la leche templada con café sobre la mezcla de huevos, batiendo constantemente para evitar que los huevos se cocinen.
- Hornear el flan:
- Precalienta el horno a 175°C (350°F).
- Vierte la mezcla de flan en la flanera caramelizada.
- Coloca la flanera en una bandeja de horno profunda y vierte agua caliente en la bandeja hasta que llegue a la mitad de los lados de la flanera para crear un baño María.
- Hornea durante 1 hora y 15 minutos o hasta que el flan esté cuajado pero aún ligeramente tembloroso en el centro.
- Enfriar y desmoldar:
- Retira el flan del horno y deja enfriar a temperatura ambiente. Luego refrigera por al menos 4 horas, preferiblemente durante la noche.
- Para desmoldar, pasa un cuchillo por el borde del flan y coloca un plato invertido sobre la flanera. Voltea el plato y la flanera juntos con un movimiento rápido.
- Servir:
- Justo antes de servir, decora con nata montada y esparce las nueces tostadas y picadas.
- Si lo deseas, añade unos granos de café cubiertos de chocolate o espolvorea con cacao en polvo para un toque gourmet.
Consejos para elaborar el flan de café
- Asegúrate de que los huevos estén a temperatura ambiente para evitar que la leche se corte al mezclar.
- El toque de vainilla no es esencial, pero puede complementar muy bien el sabor del café.
- Tostar las nueces antes de picarlas intensificará su sabor y añadirá una dimensión extra al postre.
- El flan está listo cuando al insertar un cuchillo en el centro, este sale limpio, pero aún así el flan debe tener un ligero movimiento en el centro.
Con estos toques y detalles adicionales, tu flan de café no solo será delicioso sino también digno de un restaurante gourmet. ¡Disfruta de tu creación!
